jueves, 21 de agosto de 2014

Fortanete, Cañada de Benatanduz (...) Cuarto Pelado y Fortanete


El 21 de agosto, de mañana como debe ser, unos cuantos jarristas partimos camino de Fortanete. En la primera salida en la que me acogía el grupo se decidió coger los coches para hacer una ruta por terrenos si no nuevos del todo para algunos, sí al menos lejanos.
El plan era salir de Fortanete para, bajando el barranco de Malburgo en sus primeros tramos, ir luego hacia Cañada de Benatanduz para alcanzar el pico Capellanía, para luego bajar hacia Fortanete de nuevo.
Mañana espléndida en Fortanete, donde dejamos los coches dispuestos a pasar un buen rato en la ruta propuesta por Mons y Quique, confiados en su buen hacer. Eso sí, no sin antes reservar sitio para el almuerzo, no vaya a ser...



Camino suave y casi autopista en los inicios de Malburgo, ideal para que fuese haciéndome a las rutas turolenses, aún con un poco de miedo en las piernas por las imágenes que por whatsapp había ido mandando el grupo de sus hazañas. Estar a la altura se planteaba difícil. Las recosteras turolenses asustaban un poco, pero bueno.


Cerca de la Casa de la Torre giramos hacia la derecha, buscando los Masicos de Gálvez para alcanzar el paso de Santos Adones. La pista se vuelve interesante, como un tramo que disfrutamos con un empedrado natural que ya querrían muchos pueblos.


La subida empieza a tener algunas rampas y empiezan a subir los piñones y a bajar los platos, preguntándome si tendré desarrollo suficiente para seguir a estas fieras. Eso sí, ya aprecio lo grande que es este grupo, con algún pequeño alto para reagrupar y disfrutar del paisaje sobre el barranco de Malburgo.





A la derecha la sierra de la Cañada, que nos separa del pueblo homónimo y rampas por subir. Muy duras según algunos, que nos querían meter miedo, porque llegamos arriba en grupo y aún con fuerzas.

 

Allí, vistas magníficas que se merecen fotos: hacia el barranco de Malburgo, Pitarque...   




 Algunos se acercan al canto para hacer fotos, otros deciden subirse al hito para demostrar que trepamos todo lo que haga falta, haya rampa o no...



Y mientras tomamos un poco de avituallamiento y agua, la fauna local aprovecha las señales para calentarse después de una noche fresca al raso.



 Después rápida bajada hacia le Ermita de la Magdalena, con Olga demostrando el buen hacer de las Loscos en las bajadas, y reagrupándonos en el cruce para embocar hacia Cañada.



Paso fugaz por un pueblo aún nunca visitado (al menos por mi) y vuelta a subir a la sierra de Cañada, buscando ya el pico Capellanía. Vistas magníficas sobre el valle, que nos permiten hacer fotos que cortan la respiración por la belleza del paisaje... lo cual siempre es una buena excusa para dar un reposo a las piernas de las rampas que hemos subido. Incluida la que, en estos primeros pasos, sirve de fondo al blog, con Emily haciendo de referencia.


Una vez arriba, con la línea de los 1750 bajo nuestros pies planteamos ya la bajada hacia Fortanete. Ya se avecina la cosa suave, sin problemas... Nuestros guías reciben felicitaciones por la ruta 10 que nos han marcado.


Y ahora, a bajar, pues teóricamente ya la pista nos llevará en franco descenso hacia la meta. Con algunas dudas cerca de la Masía del Abogado, buscando la pista que nos lleve directos a Fortanete, disfrutamos una preciosa bajada entre pinos y sobre la hierba por El Gollizno. La duda llega cuando, además de bajar... subimos. ¿Será esta la pista?


Reunión de pastores... oveja muerta.


Plano por aquí, ruta por allá, pistas que se cruzan, que si unas suben, otras bajan, algún cartel mal colocado, veredas que se desdibujan... Total que cogemos la que parece la adecuada... y es la que nos lleva a disfrutar del Alto de la Tejera... Fallamos en bajar tanto por el camino de la Sierra, como por el de Cañada a Iglesuela... y atinamos, tras rodear (por suerte) los dos cabezos del Collado y tras una bajada algo más que técnica que habría hecho la delicia de alguno, a llegar al Puerto de Cuarto Pelado.


Reagrupamiento de semifinales, foto con el puerto... y a bajar (ya sin dudas, pero por carretera) hasta Fortanete.


Bajada veloz, con un firme en muy buen estado y sin coches, que nos hace llegar rápidamente al último repecho, el Pairón de San Juan (aunque con asfalto se hace aburrido), y ya camino del almuerzo que nos espera en Fortanete.


Aquí está la ruta y los datos, con un pequeño desajuste del pobre GPS del móvil en cuanto a la altura, pero bueno, sirve de referencia al menos.






Total, una magnífica ruta en una magnífica compañía. No podía haber un modo mejor de estrenarme con este magnífico grupo que acoge así a su cuarto miembro alcorconero. ¡¡Gracias a todos por tan maravillosa mañana de esfuerzo, camaradería... y buen almuerzo!!
Para la próxima, esperamos encontrar la pista buena de bajada... ;)

4 comentarios:

  1. Gracias Oscar, has hecho q me acordara de aquel día, de las bajadas y de las subidas...y de lo poco q protesté, jeje

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  2. Impresionante la crónica, las fotos, la ruta, los protagonistas, el paisaje y el escritor!!!

    Qué pena no haber podido ir, pero con documentos así unos pueden revivir las rutas y otros las descubrimos.

    Buen trabajo Óscar!!!

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  3. Impresionante la foto de "expertos en mapas". Cuanta materia gris junta para coger la ruta mas larga y complicada.
    Un monstruo Oscar
    Aupa Alcorcon

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  4. Qué paisajes! Qué pistas! Qué gran compañía! Qué protestas! Qué almuerzo!

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